Austria ha puesto en cuarentena cerca de 2 millones de personas no vacunadas, debido a que el país se encuentra superando altos niveles de infección junto a una creciente presión y demanda sobre los hospitales, los cuales se encuentran saturados de pacientes.
A partir de este lunes 15 de noviembre, todas las personas que no cuenten con las vacunas correspondientes deberán quedar confinadas en sus residencias, y tendrán permiso para salir de ellas sólo por trabajo o para comprar alimentos.
Austria cuenta con alrededor del 65% de su población vacunada, siendo este el país con la menor cantidad en toda Europa occidental. Su tasa de infección va cerca de los 800 casos por cada 100.000 personas, una de las más altas del continente.
En general, el continente europeo es una de las regiones más afectadas por el virus, donde varias regiones han presentado un gran aumento de casos positivos, por lo que han aumentado las restricciones y advertencias pertinentes.
Estas nuevas medidas durarán inicialmente 10 días.